lunes, 15 de julio de 2019

MARIA ÁNGELES LARA CONSUEGRA: CAMBIEMOS EL CAMBIO


MI VISIÓN POÉTICA DEL CAMBIO CLIMÁTICO

OSO POLAR
Blanco soy, mas ahora negro por dentro,
cual oscura soledad y tristeza,
que hasta la más mínima pureza
destrozaste sin miramiento.

Pensabais en vosotros,
sin mirarnos a nosotros,
pensando en vuestro beneficio,
ignorando nuestra pérdida.

Tristes los ojos que miran,
puro el corazón que ayuda,
negra el alma de quien jura
y no cumple su palabra.

No, no quiero,
no quiero acabarme,
a terminarme rehúso.
Pero unamos nuestras manos,
nuestras manos juntemos
para acabar con todo 
y ayudar a que no se derrita el polo.

JUVENTUD
Dime, gobernante,
¿eres capaz de luchar contra un león y salir triunfante?
Si la respuesta es no,
¿por qué he de dejar mi vida en tus manos?

Dígame, mi rey,
¿incumplió usted alguna vez la ley?
Si la respuesta es no,
mire a su alrededor.

No queremos esperanza,
no queremos compasión,
sino que al cambio climático,
le den una solución.

Los adultos solo pensáis 
en lo que al dinero respecta,
ignorando el hogar
y las posibles consecuencias.
Consecuencias que ya están aquí 
y, cuando estáis a punto de ahogaros 
y os dais cuenta de que el dinero no puede ayudaros esta vez,
cerráis la boca, intentando retrasar lo inevitable.

Y seremos nosotros los que pagaremos
las consecuencias de vuestros actos,
sin haber podido elegir nuestra vida,
sin poder hacernos una idea de qué hubiera sido de nosotros
Si hubierais parado esto antes.

Pero abramos los brazos,
sintámonos mejor,
que nosotros no os guardaremos rencor
si aún estáis dispuestos a ayudar.

Solo quería vivir en paz y pasó, no sé,
tal vez, nací para esto.
Tal vez nací para vivir las desventajas de vuestro día a día.
No yo, sino toda la biosfera y el biotopo
sufren día a día las consecuencias de vuestra pereza.
Los adultos que llenáis vuestros bolsillos con el sufrimiento de otros
solo os preocupáis de llenarlos más aún,
aunque os estéis ahogando cada vez más,
aunque para ello deba acabarse el planeta.

PLANETA
Os criasteis dentro de mí,
gracias a mí,
aunque no os pareció suficiente.

Nunca me quejé,
y hogar y recursos siempre os presté.
Os he ayudado
y como juguete me habéis tratado.
Me siento usada, decepcionada,
sin fuerzas para continuar,
aunque eso a vosotros os da igual.






jueves, 4 de julio de 2019

LUCIANA MOLINA GREGOLI: ÁLEX Y LEVI



        
 Pleno siglo XXI, más concretamente 2019, y, como todas las noches, Alejandro estaba esperando a que su madre le pusiera la cena. Alex es un niño de 15 años, no muy alto, con un pelo castaño bastante bien cuidado y unos ojos negros intensos, y, como todos los chavales de su generación, está muy desentendido de lo que es cuidar el planeta.
         Como aún faltaba para la cena, su madre le mandó que fuera a tirar la basura. Se enfadó porque perdió la partida que estaba jugando en la Play y, tras varios refunfuños, se puso las pantuflas, cogió la basura y bajó a la calle. Cuando estaba acercándose al contenedor, pudo divisar un destello debajo de este. La oscuridad invadió su cuerpo y, tras encestar la bolsa de basura en el cubo como si fuera un jugador profesional de la NBA, se agachó para ver aquella luz.
         Era una esfera luminosa y en su interior se podía apreciar que había algo, pero era difícil descifrar qué. Parecía que esa bolsa se podría abrir y Alex quiso intentarlo. Al presionarla, se abrió y absorbió a Alex en su interior. El muchacho quedó inconsciente, por lo que, cuando abrió los ojos, se sorprendió al no saber dónde se hallaba. Desorientado, miró a su alrededor, empezó a caminar con miedo, porque allí no había nadie y eso no lo tranquilizaba. Pocos pasos después, escuchó ruidos y buscó con la mirada su procedencia.  Al parecer, venían de unas bolsas de basura que había tiradas en la esquina de lo que podría ser la calle principal de una avenida. No entendía muy bien lo que estaba viendo: ante sus ojos una persona diminuta con alas estaba luchando por liberarse de una red que en otro momento estuvo ocupada por naranjas. Pensó que su mente tenía mucha imaginación para meterlo en aquellos sueños y, con mucho cuidado, trató de ayudar al hada. Esta, cuando consiguió ser liberada, salió volando lejos de aquella basura esperando que el chico la siguiera. Y así fue. Cuando llegaron a un parque más limpio, el silfo le dio las gracias por la gran hazaña que realizó segundos antes.
         El silfo, que se presentó como Levi, es el silfo de la naturaleza y por eso la ama. Es pensativo, nostálgico, diligente y un poco inseguro. Posee un rápido ingenio y toneladas de encanto, es uno de los más elegantes y de muy buenos modales. Si a la naturaleza le “duele” algo, él absorbe el dolor. Tuvo que sentarse un momento, pues las condiciones del planeta lo dejaban sin energía y tenía que descansar con frecuencia.
         Hechas las presentaciones, a Levi le costó hacer creer a Alex sobre el sitio donde se encontraba y qué había pasado…Era su ciudad en el futuro. El mundo estaba siendo destruido, ni más ni menos, por el ser humano. Las personas cada vez tenían menos conciencia sobre el cuidado del planeta y es por eso que habían llegado a esa situación en la que el aire que se respiraba estaba contaminado por todo tipo de gases tóxicos de fábricas, los animales del mar nadaban entre plásticos, los árboles estaban mustios y los pájaros no tenían dónde descansar de su vuelo e inundar la flora de su canto; los animales terrestres también se encontraban sin fuerza y las mamás no eran capaces de cuidar de sus crías y, por ello, algunas especies estaban al borde de la extinción. La mayoría de los días estaban teñidos de gris porque al Sol le costaba hacer su aparición y las flores, por su ausencia, no sacaban sus pétalos a relucir, las abejas no las podían polinizar y, debido a ello, las abejas acabaron por extinguirse. Cada catástrofe desencadenaba una peor, los recursos naturales estaban por terminarse, al planeta no le quedaba mucho tiempo y Levi necesitaba la ayuda de Alex para cambiar eso.
         De acuerdo, os preguntaréis… ¿Cómo podría cambiar eso un niño de 15 años solo?  Muy  fácil, con las influencias. Levi sabía que Alex tenía muchos amigos y compañeros de clase que no reciclaban y no ayudaban a cuidar el mundo y por ello lo eligió. Levi estaba dispuesto a enseñarle partes del mundo que estaban peores que su ciudad y también le enseñaría cómo ayudar a cambiar todo eso.
         El primer lugar a donde se dirigían era a China, país con más población y más contaminación del mundo. Al llegar allí con un chasquido de dedos por parte de Levi, Alex empezó a mirar hacia todos lados desconcertado, porque no le dio tiempo a preguntar a dónde iban cuando el silfo hizo ese pequeño movimiento. Iban caminando por las calles de Pekín, cuando empezó a ver a unas pocas personas saliendo de un edificio que parecía abandonado. Por un momento quiso acercarse a preguntarles cómo es que había sucedido todo esto, pero una pequeña mano tiró de su camiseta e hizo que se girara para encontrarse con Levi, negando lentamente como si hubiera leído su mente. De un momento a otro, Levi empezó a caer al suelo alertando a Alex, que, en un rápido movimiento, puso su mano debajo de él dejando que se sentara en su mano para descansar. Al parecer, como Levi le dijo a Alex, las teletransportaciones también gastan una mayor energía, pero descansando podría recuperar al menos la mitad de esta. Después de que Levi descansara, visitaron otros países, entre ellos los que lideraban las listas de alto riesgo de contaminación, como Estados Unidos, India, Rusia y Japón. Cuando llegaron a la última ciudad, Tokio, Levi ya no tenía energía. Alex se percató de esto y varias lágrimas desbordaron de sus ojos por la impotencia que le daba ver a morir a aquel silfo entre sus manos. Levi, con la última poca de energía que pudo reunir, chasqueó los dedos, se convirtió en un pequeño árbol dentro de una bola de cristal, siendo eso lo último que vio Alex antes de regresar a casa.
         Alex, al despertar por la mañana, pensó que todo había sido un sueño. Un poco más consciente abrió su mano y vio la bola de cristal con el árbol dentro. Sabía que ese era el símbolo que el silfo había dejado cuando había muerto, sin embargo, recordó cada palabra que Levi le había dicho y, lo más importante, la manera de cuidar el planeta. Era sábado, por lo que Alex no tenía que ir al instituto y aprovechó esa tarde y parte del domingo para hacer el trabajo que su profesor de biología le había mandado. Estaba tan entusiasmado con el trabajo que estaba realizando, que no veía la hora de llegar y presentarlo.
         Llegado al fin el día que Alex tanto había esperado, fue a su clase sonriente, entró en su aula y se sentó en su asiento correspondiente y así se dispuso a esperar a segunda hora para, por fin, hablar del cambio climático. El entusiasmo que sentía no le quitaba los nervios de hablar delante de toda su clase. No obstante, ahí estaba esperando a ser llamado para hablar de un tema muy importante para él. Llegó su momento, fue nombrado y tuvo que salir al frente. En sus manos llevaba una cartulina donde se podían leer algunos consejos para cuidar el planeta. Empezó a hablar y, a medida que iba explicando aquello, su corazón se calmó, lo que le ayudó también pensar en Levi, que seguro que allá donde estuviera se sentíría orgulloso de Alex, pues el chico estaba poniendo todo de su parte.
         “Si todos hacemos nuestra parte, podemos beneficiarnos a nosotros mismos y a este gran planeta en el que tenemos la suerte de vivir…”
         Al final de su explicación comenzó a contar alguno de los métodos para ello como:
“La regla de las tres R’s: reducir, reusar y reciclar, que permite disminuir la cantidad de basura que se genera y mejorar sus procesos de manejo".
         Cuidar el agua y apagar la luz: para disponer de agua fresca y de electricidad, es necesario gastar energía. Con simples medidas como apagar las luces que no se ocupan, reparar filtraciones, aprovechar al máximo la luz natural o aislar apropiadamente tu hogar, puedes disminuir considerablemente el consumo de energía.
         Plantar árboles: los árboles producen oxígeno, previenen la erosión de los suelos, controlan las inundaciones y también sirven de refugio para algunos animales silvestres. Si plantas alguno, harás del planeta un lugar mejor.
         Proteger fuentes de agua locales: si cerca de tu hogar hay un río, lago o incluso el mar, no lances basura en ellos. Tampoco botes desechos como pintura, aceite o productos químicos directamente a la tierra, porque puedes contaminar napas subterráneas.
         Conducir menos, caminar más: si necesitas usar un vehículo para llegar a un lugar, usa el transporte público o comparte coche con tu vecino o amigos. Y si tu escuela no está tan alejada de tu hogar, puedes levantarte un poco más temprano e irte caminando o en bicicleta.
         Comprar productos que sean eficientes en términos energéticos: existen una serie de electrodomésticos y aparatos que consumen poca energía y, a la vez, entregan un servicio de calidad.
         Adquirir productos elaborados localmente: esto te permitirá reducir tu huella de carbono, ya que podrás utilizar menos plásticos, contribuir al menor gasto de combustible por traslado de productos y usar menos material de empaque, entre otras cosas.
         No tirar basura: aunque parece algo obvio, muchas personas que van por la calle o en sus coches tiran papeles, bolsas, chicles, colillas de cigarrillo o cualquier cosa que consideren basura, sin tener en cuenta que su actuar tiene un gran impacto en el medio ambiente. Si tú lo haces y quieres ayudar, debes cambiar este hábito.”
         El profesor quedó tan asombrado con el trabajo del chico que, al terminar la clase, fue a contárselo a los demás profesores. Habían decidido tomar el trabajo de Alex para convertirlo en un proyecto para el instituto. Claramente, primero se lo comunicaron a él, que, al escucharlo, no se lo podía creer. Tal vez no pudo salvar a Levi, pero sí se aseguraría de que ningún silfo o hada de la naturaleza muriera si él podía evitarlo.




viernes, 7 de junio de 2019

PROYECTO ReencontrARTE: MARIANNE VON WEREFKIN


Proyecto ReencontrARTE: este proyecto, propuesto por la Red de Bibliotecas Escolares de nuestra provincia, nació con la intención de dar visibilidad, desde las bibliotecas escolares, a algunas mujeres artistas que han sido poco valoradas. En nuestro centro hemos trabajado a Marianne von Werefkin, que ha sido todo un descubrimiento para nosotros y a la que admiramos profundamente. En este video podemos conocerla mejor, saber cómo la ha visto el alumnado y contemplar el producto final: nuestro proyecto ha quedado plasmado en un paraguas, como soporte artístico de la vida y la obra de Marianne von Werefkin.




domingo, 7 de abril de 2019

NUESTROS/AS CAMPEONES/AS DE LECTURA

Los/as alumnos/as que han sacado más libros de nuestra biblioteca durante el segundo trimestre son:

  • Con 6 ejemplares:
          - Isabel Gutiérrez Montes, de 1º de E.S.O. B
  • Con 5 ejemplares:

          - Juan Oviedo López, de 1º de E.S.O. B

          - Lucía Sendra Muñoz, de 4º de E.S.O. B

          - Aarón Escabias Cobo, de 1º de E.S.O. B


  • Con 4 ejemplares:

          - Elizabeth Galán Contreras, de 2º de E.S.O. A

          - Luis Lin, de 1º de E.S.O. C




   Los grupos más lectores son los siguientes:


  • 1º de E.S.O. B, con 34 ejemplares.
  • 1º de E.S.O. C, con 13 ejemplares.
  • 2º de E.S.O. C, con 12 ejemplares.

viernes, 29 de marzo de 2019

CERTAMEN LITERARIO DEL I.E.S. "FUENTE DE LA PEÑA"


DIARIO JAÉN: CONCURSO DE REDACCION "JÓVENES PERIODISTAS"


Diario JAÉN promueve una nueva edición del Concurso de Redacción Jóvenes Periodistas con la Junta de Andalucía a través de la Consejería de Educación. Una iniciativa que cuenta con la colaboración de la FAMPA Los Olivos, de la Fundación Unicaja y El Corte Inglés. El Concurso se desarrollará en esta nueva edición ateniéndose los participantes a las siguientes bases:

1.-) El tema objeto del presente concurso es libre dentro del marco de lo que la prensa escrita aborda diariamente, aunque como referente para esta edición se propone escribir para las categorías A, B y C sobre: “Cómo se ve la sociedad de hoy a ojos de un niño adolescente”. Y para la categoría D se propone escribir sobre: “¿Cómo ven nuestros mayores la sociedad de hoy”.

2.-) A este concurso podrán presentarse todos los alumnos/as de la provincia que cursen sus estudios en un centro de enseñanza no universitaria.

3.-) Los trabajos se presentarán en los impresos ya facilitados, escritos a mano con letra clara o con ordenador a doble espacio, los trabajos se podrán presentar escritos en español, inglés o francés. El trabajo deberá estar acompañado de una foto o dibujo para su ilustración, así como titular y pie de foto para asemejarlo a una noticia de prensa.

4.-) El trabajo, que deberá ser original y, por lo tanto, no presentado anteriormente a ningún otro concurso, se presentará individualmente por cada alumno/a.

5.-) El envío de originales se efectuará bajo sobre, a la siguiente dirección: Diario JAÉN “XXXI Concurso de Redacción Prensa-Escuela”. C/. Torredonjimeno, 1. Polígono “Los Olivares”. 23009 – JAÉN. El plazo de recepción de trabajos finalizará el 15 de mayo.

6.-) El jurado calificador, cuyo fallo será inapelable, estará formado por representantes de cada una de las instituciones citadas en el preámbulo.

7.-) El fallo del jurado y la fecha de entrega de premios se publicará en las páginas de Diario JAÉN, quedando el jurado facultado para resolver cualquier aspecto no reflejado en las presentes bases.

8.-) Solo se podrá obtener premio por una vez en cada una de las distintas categorías. Esto no excluye la participación en el concurso.

Premios para esta convocatoria

Categoría A (6 a 9 años):

- 1er. Premio: Libro electrónico + lote de libros de lectura.

- 2º. Premio: Patín eléctrico.

- 3er. Premio: Cámara de fotos digital

Categoría B (10-13 años):

- 1er. Premio: Libro electrónico + lote de libros de lectura.

- 2º. Premio: Patín eléctrico.

- 3er. Premio: Cámara de fotos digital.

Categoría B (Inglés):

- 1er. Premio: Libro electrónico + lote de libros de lectura.

Categoría B (Francés):

- 1er. Premio: Libro electrónico + lote de libros de lectura.

Categoría C (14 a 17 años):

- 1er. Premio: Ordenador portátil multimedia.

- 2º. Premio: Patín eléctrico.

- 3er. Premio: Cámara de fotos digital.

Categoría C (Inglés):

- 1er. Premio: Ordenador portátil multimedia.

Categoría C (Francés):

- 1er. Premio: Ordenador portátil multimedia.

Categoría D (Educación Permanente):

- 1er. Premio: Ordenador portátil multimedia.

- 2º. Premio: Viaje de una semana para 2 personas a media pensión, a realizar obligatoriamente durante el año 2019.

- 3er. Premio: Cámara de fotos digital.

Premio Especial “Al mejor ‘selfie’ escolar”

El Concurso de Redacción Jóvenes Periodistas incorpora desde el año 2013 –con motivo de su 25 aniversario– una modalidad de Fotografía. En esta ocasión se premiará el mejor “selfie” escolar de cada una de las categorías.

+ Se entregará un 1er premio dotado de equipo fotográfico para las categorías A, B, C y D.

La fotografía deberá ser enviada en papel, formato 15 x 20, acompañada de un texto muy breve en el que se explique quiénes aparecen en la imagen y en ella debe de figurar los datos del centro y del alumno/a que ha realizado la fotografía.

Las fotografías se enviarán por correo ordinario a través del Centro o de forma individual a la dirección: Diario JAÉN, S.A. XXXI Concurso de Redacción Prensa Escuela. Premio Especial de Fotografía. Cl. Torredonjimeno, 1 Polígono los Olivares, 23009 Jaén.

Premios especiales a los centros educativos

Premio especial al colegio que más trabajos aporte al “XXXI Concurso de Redacción (Cálculo porcentual al número de alumnos).

1er. Premio. Un ordenador de sobremesa con monitor.

2º. Premio. Equipo fotografía, compuesto por cámara fotográfica digital, bolsa y trípode.

Premio especial de incentivación a la participación del alumnado. Se otorgará al profesor/a que haya participado en el envío de los trabajos premiados.

Premio: Una suscripción a Diario JAEN durante 6 meses y una colección de libros editados por Diario JAEN.

+ Un diccionario de Inglés o Francés para los profesores coordinadores de los trabajos premiados en dichos idiomas.

Premio a la participación: Sorteo de un reloj smartwach entre todos los alumnos y alumnas participantes.

Premio especial XXXI Aniversario

A la mejor redacción: Un (1) altavoz bluetooth.


domingo, 10 de marzo de 2019

CLUB DE LECTURA: "NO QUIERO SER TONTA", DE FRANCISCO MENA

El pasado miércoles, dia 6 de marzo, tuvo lugar una nueva sesión del club de lectura del I.E.S. "Fuente de la Peña", dedicada al libro "No quiero ser tonta", de nuestro compañero Francisco Mena. Los/as profesores/as y alumnos/as participantes tuvimos la oportunidad de entablar un interesante diálogo con el autor, que nos sirvió para comprender mejor su obra y el proceso de su creación. Durante la tertulia, se trataron temas relacionados con los intereses del alumnado, como el amor, la amistad, el esfuerzo, la personalidad, las relaciones con los padres, etc.







miércoles, 27 de febrero de 2019

NUESTRAS RESEÑAS. LUCÍA PÉREZ FERNÁNDEZ: "NO QUIERO SER TONTA"




María es una chica como otra cualquiera: tiene buenos amigos, su progreso académico es de lo más sobresaliente y en su casa se respira paz y armonía. Pero, de la nada, un día cualquiera, le ocurre algo que la obligará a dejar atrás la vida que durante tanto tiempo había forjado en Madrid y así comenzar de nuevo en otra ciudad haciendo "borrón y cuenta nueva".

María odia con todas sus fuerzas tener que despedirse de sus amigos, especialmente de Daniel, el único chico que le hizo experimentar las famosas "mariposas en el estómago". Cuando llega a su destino, comienza a escribir un diario, que le ayudará a construir una nueva vida.

El tercer día de clase, María comienza a hacer amigos en el instituto. Su madre, por otro lado, ya le había concertado una cita con algunas chicas, Julia y Marta, que estaban dispuestas a ser amigas de la recién llegada. Pensó que sería buena idea buscar alguna amiga para su hija lo antes posible.

Pero María prefiere elegir a sus amistades, porque no quiere seguir la opinión de la mayoría ni que decidan por ella. Así, forma una pandilla con Luis, Nono y Julia. Con ellos experimentará nuevas cosas, algunas maravillosas y otras no tanto. Pero todas ellas les sirven para aprender a hacerse más fuertes, para que su destino dependa, en la medida de lo posible, de sus propias decisiones.

LUCÍA PÉREZ FERNÁNDEZ 4º DE E.S.O. B

COLLAGE LITERARIO: "NO QUIERO SER TONTA"

Mª Ángeles Lara Consuegra, alumna de 2º de E.S.O., ha realizado un collage literario sobre el libro "No quiero ser tonta" de Francisco Mena.



jueves, 24 de enero de 2019

PILAR RAYA: UNA NOCHE EN LA BIBLIOTECA


Unos niños que se llamaban Ciro y Pablo tenían que prepararse un examen y quedaron una tarde para estudiar en la biblioteca más antigua que había en su barrio.

La biblioteca estaba rota por todos lados: las ventanas, las puertas, las escaleras, los libros. Decían que casi nadie iba a la biblioteca. Normalmente estaba allí la mujer que vigilaba y también la que ordenaba los libros. También había un señor mayor, alto y con gafas, que miraba los libros que cogían.

Cuando terminaron de estudiar, fueron a coger algún libro, pero Pablo se metió por un pasillo muy extraño. Algunos libros no tenían nada escrito. Las estanterías tenían pintura por todos lados y todo estaba lleno de telarañas. Pablo llamó a voces a Ciro y el señor que vigilaba fue corriendo para ver dónde estaban. Cuando los encontró, les dijo enfadado: "fuera de aquí, que ya vamos a cerrar la biblioteca". Pablo y Ciro salieron, pero no estaban convencidos, así que se quedaron esperando en un callejón a que cerraran y saliera de allí el hombre.

Después de dos eternas horas, todos se fueron de la biblioteca. Pablo y Ciro no sabían muy bien cómo entrar y vieron una puerta en ese mismo callejón. Le dieron unas patadas hasta que la abrieron y entraron rápido, antes de que los vieran, porque escucharon unas voces cerca. Dentro de la biblioteca, todo estaba demasiado oscuro, no se veía nada. Tuvieron que estar un buen rato buscando a tientas un interruptor de la luz. Ciro lo encontró, lo pulsó y toda la sala se iluminó.

Cuando tuvieron luz, fueron en busca de ese extraño pasillo. Pero, cuando lo estaban buscando, notaron algo raro en la biblioteca. Todos los libros estaban casi fuera de las estanterías y se escuchaban ruidos de una parte de la pared. Pablo notó que estaba hueca y Ciro dijo: "a lo mejor esos libros que están vacíos abren la pared". Pablo dijo que no podía ser: "tiene que ser un libro que esté cerca".

Empezaron a toquetear todos los libros y uno de ellos abrió la pared. Pero había que poner una contraseña, porque encontraron unos números que se podían mover. Pablo pensó que la contraseña tenía que estar en alguno de los libros, así que se pusieron a buscar. Después de unas largas horas, no encontraron nada. Pero Ciro y Pablo se dieron cuenta de que cada vez que se caía algún libro se volvía a colocar solo en la estantería. Eso les pareció muy extraño y pensaron: "¿por qué no tiramos todos los libros y el que no se coloque solo puede ser el que tenga la contraseña?"

Bueno, eso hicieron y tenían razón, porque tiraron un libro demasiado gordo y pesado y no se levantó ni un centímetro. Ellos cogieron el libro y empezaron a buscar. Encontraron un papel metido entre las páginas, lo desdoblaron y vieron unos números que encajaban con la contraseña que tenían que poner. Los pusieron y se abrió y, entonces, todo empezó a temblar como si fuera un terremoto. Detrás de aquella pared había...¡Personajes de los libros! Estaban en una fiesta que ellos habían montado. Cuando se dieron cuenta de que estábamos allí, se asustaron mucho.

Ciro y Pablo les dijeron: "no tengáis miedo de nosotros, no os vamos a hacer nada". Un hada muy pequeñita les dijo: "¿De verdad que no nos vais a hacer nada?" Entonces, todos los personajes les dijeron: "No podéis decir nada a nadie". Ciro les preguntó: ¿Y lo sabe un señor mayor, alto y con gafas?" Los personajes dijeron: "Sí, ese señor fue quien nos creó."

Cuando ya se hizo demasiado tarde, Ciro y Pablo se fueron a sus casas y, desde entonces, se iban todas las noches a la biblioteca.



PILAR RAYA MUÑOZ 1º DE E.S.O. A

domingo, 20 de enero de 2019

LUCÍA PÉREZ: UNA NOCHE EN LA BIBLIOTECA


Un día feo y lluvioso tenía que ir al instituto. Cuando salgo de mi casa andando me suele acompañar mi amigo. Llegamos y lo primero que hicimos fue irnos directamente a la cafetería. Su aspecto era feo y sucio. Nos pedimos tostadas de tomate y dos zumos de naranja. Terminamos de desayunar y sonó la campana para comenzar la primera clase.

Al fin terminamos todas las clases. Luego solemos irnos a la biblioteca a estudiar y a leer libros de misterio. Al día siguiente teníamos un examen de Historia y había que estudiar muchísimo. Cuando terminamos de estudiar, empezamos a leer libros. Uno de ellos era muy interesante, porque trataba sobre unas chicas que se quedaban una noche entera en un cementerio en el día de Halloween y, entonces, se me ocurrió una idea. Expliqué a mi compañero lo que se me había ocurrido: nosotros íbamos a pasar esa misma noche en la biblioteca. Él me respondió: ¿cómo le piensas explicar a tu madre que te vas a quedar una noche aquí? Después de pensar un rato, se me ocurrió algo y llamé a mi madre. Le dije que me quedaba con mi amigo a dormir porque teníamos un examen muy difícil de estudiar.

Eran sobre las nueve y ya había amanecido. Cuando pasó media hora, una mujer entró en la biblioteca para vigilar si había alguien. Nosotros fuimos listos y nos escondimos. Habían pasado muchos minutos y la mujer seguía todavía allí. Más tarde oímos cómo se cerraba la puerta con llave. Cuando salimos de ese pequeño cajón, empezamos a registrarlo todo.

Pasaron las horas y nos aburríamos mucho. Pero, de repente, mi amigo desapareció. Me puse nervioso porque no lo encontraba. Al registrarlo todo, encontré unos libros con unos pequeños candados muy brillantes. Me despertaba mucha curiosidad saber qué podía haber dentro de ellos. Lo puse todo "patas arriba". Me cansé de buscar y me di cuenta de que, enfrente de donde estaba yo sentado, había una pequeña llave con forma irregular.

Cogí la llave y empecé a probar candado por candado. Al fin encontré el candado correcto. Cuando abrí el libro, me di cuenta de que estaba muy bien cuidado y me pregunté por qué estaría en una estantería de madera tan sucia. Empecé a leerlo: era de suspense y de miedo. Lo dejé abierto.

Estaba todo el rato pensando dónde podía estar mi amigo. Era muy tarde y estaba cansado. Al final, me dormí.

Después de mucho rato, me volví a despertar y vi cómo los personajes salían del libro. Me quedé con cara de asustado. Me levanté de la mesa en la que había dormido, me acerqué a los personajes y les pregunté: ¿Cómo os habéis salido de los libros? Pero no me respondieron. Giré la cabeza y allí estaba mi amigo. Me acerqué a él y fui a abrazarlo. En ese momento, él me dijo: ¿Quién ha abierto el libro? Yo le respondí. Él me explicó que había que encontrar la llave para poder abrir el libro y meter dentro a los personajes antes de que empezara la primera hora de clase. Cuando nos quisimos dar cuenta, los personajes eran muy grandes y lo destrozaron todo. Después de un rato, conseguimos meter dentro a los personajes y pudimos cerrar el libro.

Empezaba la primera clase. Nos escondimos para que la profesora no nos viera al abrir la biblioteca. Cuando la abrió, nos fuimos corriendo. Llegó la tercera hora y teníamos el examen de Historia. Me di cuenta de que no habíamos estudiado nada, pero fue una noche inolvidable.



LUCÍA PÉREZ PIEDRA. 1º DE E.S.O. A